El nuevo símbolo de la eficiencia energética de las calderas

07 Jul El nuevo símbolo de la eficiencia energética de las calderas

La caldera de gas natural es el equipo principal de la instalación de gas. Son los encargados de calentar el agua mediante combustión de gas para que los consumidores puedan conseguir agua caliente y calefacción en casa.

Desde 2015, el reglamento europeo sobre productos relacionados con la energía (ErP) en términos de etiquetado energético y diseño ecológico es obligatorio.

Esta regulación sigue vigente, pero en 2021, con el cambio en las facturas de la luz, se verá afectada. Se trata de calderas, bombas de calor, radiadores, acumuladores de menos de 2000 litros.

Si bien no es obligatorio comprar electrodomésticos con etiqueta ecológica, como lavadoras, lavavajillas, frigoríficos, etc., cada vez es más común tenerlos con el fin de lograr el objetivo de un mayor ahorro energético en la casa porque además como contribuir a la reducción de la huella ecológica del planeta.

Los datos que proporciona la etiqueta

Los datos de esta etiqueta son la eficiencia energética en una escala de mayor (A), la menor eficiencia (G), el nivel de ruido, la potencia calorífica nominal y la cantidad de agua caliente que puede producir.

Por ello, debido a las intenciones de los fabricantes y consumidores de proteger el medio ambiente, es de gran importancia tener en cuenta esta clasificación.

Hoy, las marcas luchan por ser reconocidas en términos de ahorro energético y conciencia medioambiental. Las calderas actuales ahorran entre un 20% y un 30% de las facturas en comparación con las calderas convencionales.

Esto se debe al uso de calor en las calderas que proporciona la noticia. Se redirecciona el vapor generado por la combustión, cuya función es precalentar el agua dentro de la caldera. Por tanto, el rendimiento de las calderas nuevas es superior, alrededor de un 110% más de rendimiento en comparación con el rendimiento del 70% u 80% de las calderas convencionales.

Otra peculiaridad esencial es que la eficiencia energética de las calderas es mucho mayor cuando trabajan a bajas temperaturas, entre unos 50 ° y 60 °, utilizan más el calor disipado.

El funcionamiento eficiente de la caldera de condensación tiene las siguientes rentabilidades:

• Ahorran energía y son más eficientes
• Son más sostenibles porque pueden recuperar el calor producido por la condensación del vapor de agua. Pueden reducir las emisiones de óxido de nitrógeno y dióxido de carbono hasta en un 70%.
• Se puede subvencionar la instalación de calderas. A medida que las comunidades autónomas prestan cada vez más atención al medio ambiente, esta ayuda se proporciona para promover la implementación de tecnologías tan eficientes.
• Tienen mayores rendimientos. Utilizan el calor del vapor de agua y alcanzan un rendimiento del 100%.

Además, entre las rentabilidades que muestran esta clase de calderas tipo A, es que son mucho más silenciosas que las tradicionales. Esto contribuye a la comodidad y tranquilidad de la familia.